De vuelta en el Cap's

 

Septiembre de 2009

Después de unas semanas    l     e     j    o    s   vuelvo a estar cerca.

Feliz, felices...

 

Alquilamos un coche ya que es la única manera de recorrer la isla y visitamos algunos de los lugares más emblemáticos. Me gusta la isla; siento que es muy especial; también Marina Rubicón es un puerto muy pintoresco e ideal para tener el barco.

 

Me alegro  mucho de poder ver de nuevo a Carlos y Carmen, un par de valientes que ya han conseguido traer a su Donan hasta Canarias. Parecen dos conejeros y aunque no llevan tanto en la isla se han hecho con ella a un ritmo muy veloz.

 

Conocemos por casualidad a Julio y Soledad, que llevan navegando por el Caribe con su velero Ilusión desde el año 1992. Ahora tienen el barco en San Blas donde están desde hace cinco años y el año que viene por fin cruzan al Pacífico. Es una suerte poder conocer a personas tan agradables y de las que tantas cosas podemos aprender.

 

 

 

 

En Palmas de Gran Canaria con el Bahía

 

Septiembre de 2009

Jose se queda unos días solo y aprovecha para ir a visitar a su amigo Ángel a Las Palmas. Un ferry desde arrecife le lleva directo en cinco horas. Allí está el Bahía las Islas con su capitán y su tripulante Rufino.

Pasaron unos buenos días en la isla y pudieron conocer a otros tabernarios. También aprovecharon para hacer algunas compras ya que hay mucho material. Fabricaron para los respectivos barcos un aparejo de hombre al agua con un palo de aluminio extensible de un cepillo, una luz automática, unos plomos, una boya y una bandera.

Las Palmas es una ciudad con mucho ruido; muy diferente a la tranquilidad característica de Lanzarote. ha crecido muy rápido en poco tiempo y los edificios sobresalen en todos los paisajes. Lanzarote, al contrario, mantiene una uniformidad en su construcción; las casas no superan las dos plantas y todas son blancas, que mezcladas con el paisaje volcánico y las palmeras hacen un entorno muy especial.

 

Óscar se une al grupo un día más tarde.

A finales de la semana inician la vuelta a nuestro base, Marina Rubicón. Como los vientos vienen del norte un rumbo directo sería muy incómodo y por eso, ponen rumbo al sur de Fuerteventura donde fondearon una noche en Morro Jable. Al día siguiente navegan paralelos a la costa este de la isla hasta que llegaron a Lanzarote quedando fondeados en una de las playas más hermosas de la isla, Papagayo.

 

 

 

Cada vez más afincados en Lanzarote

 

Octubre de 2009

 Regreso a la isla. Jose, Ángel y Óscar vienen a buscarme al aeropuerto y como María viene unas horas más tardes hacemos tiempo y vamos hasta Puerto del Carmen. Más tarde recogemos a María, la tripulanta del Bahía, y como ya es el mediodía nos dirigimos hacia Arrieta a comer un poco de pescadito. Durante los siguientes días nos dedicamos a recorrer la isla ya que Óscar y María no la conocen y visitamos los lugares más típicos. Por primera vez voy a Las Montañas de fuego, parque nacional de Timanfaya; una excursión en autobús para ver los volcanes y sus cráteres.

 

Otro día salimos a navegar con el Cap's. Oscar viene con nosotros. No hay demasiado viento pero podemos ir a vela. Después fondeamos en Papagayo y nos damos unos baños. Voy recuperando y voy haciendo mis pinitos poco a poco... Me siento contenta y satisfecha.

 

Aprovechando que tenemos movilidad con el coche, Julio y Soledad nos invitan a comer una rica barbacoa. Compartimos experiencias y nos muestran el vídeo de la construcción de su barco. 5 años de sus vidas dedicados a modelar su sueño, un velero de 45 pies de eslora de fibra de vidrio, totalmente construido por ellos. Es un placer oirlos y no paran de contar cosas que María y yo intentamos anotar de forma resumida en nuestra libretita y es que no nos podemos despistar porque los patrones enseguida preguntan ¿María, has apuntado? ¿Virgi, ya has tomado nota?

 

 

 

Navegamos a Lobos y cumple

 

13 de octubre de 2009

El domingo celebramos mi cumpleaños con los amigos de la isla. Hicimos una comidita en el barco y Ángel nos preparó un rico pulpo a la gallega. Pasamos un día muy agradable.

 

Al día siguiente navegamos a la Isla de Lobos con el Bahía. Ángel, como se encuentra fondeado, nos recogió con la zodiac y después esperamos a Julio y Soledad en el One. Levantamos el fondeo a vela, ya que tiene rota la inversora, y navegamos con una pequeña brisa hasta Lobos. Por primera vez fondeé a vela. Unos baños... aunque no todos se atrevieron a probar las frías aguas de por aquí comparado con otras a las que están acostumbrados. ¡Chacho!

Comimos y levantamos fondeo. Durante el mediodía se había levantado viento y pensamos que tendríamos una buena navegada de regreso pero Eolo parece ser que se acostó a dar la siesta, y nos quedamos sin nada de nada. Intentábamos salir del fondeo pero no había manera y a pesar de la resistencia del patrón no quedo más remedio que salir de allí marcha atrás. Para colmo, se había formado una ola incómoda que no hacía más que incordiar y que debido a la popa abierta del barco la bañera se mojó como nunca lo había hecho y el patrón quedó empapado como si hubiera pasado un gran temporal. Nos divertimos, eso sí, y hay vídeos que lo testifican pero eso podría ensuciar la intachable trayectoria del Bahía.

El viento no apareció y cada vez había más mar de fondo y unas olas incómodas que venían de varios lados pero había que regresar e íbamos intentando captar cualquier térmica, aunque fuera casi inapreciable. Cuando pudimos, izamos el spi. También era mi primera vez que navegaba con él.

 

 

 

 

De barbacoas, alguna navegadita y Halloween

 

1 de noviembre de 2009

Cada día conocemos a gente nueva y aquí la gente es muy abierta y generosa y enseguida te invitan a su casa a una barbacoa y nunca faltan las papas arrugadas con mojo picón (mmm...)

Este fin de semana lo tenemos a tope. El sábado tenemos una invitación de Norberto y Montse en Malas y el domingo de Juanma y Pili en Tinajo. Comer, comer y comer... Esta es la tónica cuando estás por ahí, nos dice Sole: "te juntas en un barco o en otro..., cada uno hace algo..." Con María ya hemos dicho que vamos a adoptar la actitud del "No, gracias" pero hasta ahora no lo conseguimos. 

Nuestro día a día pasa tranquilamente, sin prisas, estamos muy relajados pero sin parar de hacer cositas y mejoras en el barco. Compartimos muchos ratos con Ángel y María con lo que nos encontramos muy bien y nos reímos mucho. Intentamos salir a navegar,  pero a veces resulta difícil cuando estás haciendo tantas cosas en el barco. Un día vienen a navegar con nosotros los susodichos del Bahía; otro día salimos solitos... Y después del despliegue de velas siempre viene fondeo en Papagayo, bañito  y comidita.

 

Julio y Soledad pronto se van para el Pacífico y nosotros hacia Barcelona, así que como no estamos seguros de si nos volveremos a ver aquí (sí, por ahí) hacemos una comidita en el barco de Carlos y Carmen. Ese día coincide con un espectáculo que hace una ONG francesa de trapecistas en los mástiles y acudimos al "evento".

 

Para Halloween el bar One organiza una fiesta de disfraces. Jose, entre regañadientes, se pone un leggins mío que ya se ha dado un poco de sí. No le va mucho este tipo de fiestecitas pero lo hace para contentarme.  

 

 

Se augura un año especial

 

2 de enero de 2010

 

Las tareas en el barco apenas nos deja tiempo para escribir. Cuando se acumula tanto  resulta más difícil resumir nuestros días. Este último tiempo se ha pasado muy rápido. Dos viajes a la península que se hacen muy cortos y apenas te da tiempo para hacer todo lo que deseas hacer; unas fiestas diferentes lejos de la familia y con una temperatura tan buena que rompe con el típico ambiente navideño. Una Nochevieja que augura un año especial.

 

Un paseo por Marina Rubicón

 

6 de enero de 2010

El 4 de enero nos vamos a Las Palmas así que nuestra estancia en Lanzarote llega a su fin.  Lanzarote es una isla que te enamora... Muy especial. Pero no es barata y nos vamos los últimos días a Las Palmas de Gran Canaria a hacer las compras.

 

Nos despedimos de nuestros amigos: el Chacho y Soledad, Carlos y Carmen, Álex, Norberto y Montse; del One,  de Marina Rubicón, de unos paisajes increíbles... de un lugar al que sabemos que vamos a volver; porque ya hay algo que nos une para siempre.